Inquietante Visión

Crecí siendo muy escéptica, porque siempre estaba buscando un sentido lógico a todo y no podía entender como quienes te hacen ir a misa los domingos no asisten a la misma, dicen que
los “Padres Mujícas: son los que predican lo que no practican”.

Lo que voy a compartir sucedió un día viernes hace ya algunos años, regresando de almorzar hacia las oficinas de la empresa para la cual prestaba servicios. Dichas oficinas quedaban ubicadas en la mezzanina de un gran almacén, tenían ventanas panorámicas y persianas, a través de las cuales al subir las escaleras, se podía observar hacia la oficina principal, era algo inevitable porque las persianas verticales siempre estaban un tanto abiertas.

Acompañada por una amiga y compañera, ella venía detrás de mí pues la escalera no era muy amplia; antes de entrar, veo a una chica delgada, de piel canela, sentada de espalda y con sus brazos puestos sobre el escritorio que está frente a la ventana, con sudadera color blanca, cabello rojizo y recogido con gacheta; al abrir la puerta y en fracción de segundos desaparece de mi vista, quedo impresionada, le comento a mi compañera y queda tan impactada como yo, ella comienzaa buscar a ver si hay alguien más, camina hacia el fondo en un área de descanso y encuentra a la supervisora de personal que es quien ocupa el escritorio donde vi a la persona, ella afirma que tiene rato allí porque está almorzando, obviamente sus características físicas y vestimenta son contrarias a las de la chica que pude observar.

Luego de ese incidente al llegar a mi casa se lo comento a mi hermano, queda sorprendido y ambos con una sensación extraña de no poder darle un sentido lógico o razonable al hecho ocurrido.

El día sábado a primera hora, me despierto con una llamada de mi compañera para notificarme de un hecho bastante dantesco y lamentable. Me informa que una chica que conocimos, porque trabajó temporalmente en la empresa, fue brutalmente atacada, violada y asesinada a media noche de ese día viernes. Toda mi piel se erizó, porque al ella mencionarla, recordé sus características físicas, ella era delgada, de piel color canela y usaba en ocasiones sudaderas, estos detalles coincidían con la
persona que vi ese día en horas del mediodía, incluso hasta el color y modo de recogerse el cabello.

Me impactó y causó mucha tristeza la noticia de su muerte pues era una chica joven y simpática.

Aunque hoy siento que todos los tiempos se tocan o integran, aun hay cosas que han sucedido que mi “mente racional” no consigue comprender, pero ya no busco explicaciones lógicas.

Relato enviado por Nuvia Peñalver, Venezuela.