Periodo Científico de la Parapsicología

Después del periodo espiritista que tuvo auge a raíz del caso de las hermanas Fox, se creó gran polémica en torno a los fenómenos paranormales que se producían durante las sesiones, es entonces cuando se les da el nombre de “fenómenos metapsíquicos”, mismos que se trataba de desvincular de conceptos filosóficos o religiosos buscando una explicación científica.

Es a partir de este momento en que se empiezan a crear diversas sociedades de investigación psíquica que estarían conformadas por grandes investigadores, curiosos e incluso por científicos notables de aquella época, surgieron revistas especializadas en donde se publicaban los numerosos experimentos que se llevaban a cabo.

Charles Richet (1859-1935) señala la iniciación de este periodo con las investigaciones de William Crookes, sabio, físico y químico que estudió uno de los más raros fenómenos parapsicológicos, las llamadas Materializaciones. Se dice que este personaje gozaba de gran prestigio y credibilidad, por ello no se dudaba de su criterio y metodología rigurosa para realizar sus pruebas.

Sir William Crookes

Crookes (1832-1919) realizó sus principales investigaciones entre 1870 y 1874. Comenzó sus trabajos con el objeto de demostrar la falsedad de los fenómenos y se dice que terminó afirmando su absoluta veracidad. Dentro de sus experimentos, se dice que los más importantes fueron los que realizó con una joven llamada Florence Cook quien tenía tan solo 15 años en ese tiempo.

En las sesiones espiritistas que realizaba Florence Cook se materializaba un espíritu que decía llamarse Katie King. Aparecía en la habitación una figura humana, a veces totalmente formada y en otras solo busto y rostro. Se dice que cuando este espíritu aparecía de cuerpo entero, solía caminar entre los asistentes y al terminar estas sesiones el espíritu se deshacía como si se tratara de un muñeco de cera. A la sustancia que conformaba los supuestos espíritus de estas materializaciones se le dio el nombre de Sustancia Ectoplásmica.

Otro personaje que realizó investigaciones rigurosas en su tiempo fue Gustav Geley. En su libro “Ectoplasmia y Clarividencia” relata experimentos realizados entre 1917 y 1918.

Entre 1920 y 1930 el profesor francés Eugene Osty hizo investigaciones con dos sensitivos, Rudy Schneider y Pascal Forthuny con resultados sorprendentes. Se dice que los experimentos de Osty no podían tacharse de charlatanería puesto que se llevaban a cabo con absoluta seriedad.

Así como los ejemplos anteriores podríamos mencionar muchos personajes respetables en su tiempo que llevaron a cabo muchos experimentos y pruebas que demostraban que los fenómenos psíquicos eran reales.

Los Primeros Congresos

Fueron muchos los interesados en encontrar respuestas a lo que aparentemente no tenía una explicación lógica o científica, es entonces cuando empezaron a llevarse a cabo varios congresos, el primero de ellos se realizó en Copenhague en el año 1921 por iniciativa del Dr. Carlo Vett, el segundo y más importante de todos se realizó en Varsovia en 1923 reuniendo a grandes investigadores. En este congreso se dejó sentado que la investigación psíquica no tenía nada que ver con ninguna doctrina moral, religiosa o filosófica.

El tercer congreso se celebraría en París en 1927 con la presidencia de Richet. El cuarto sucedió en Atenas en 1930 bajo la dirección del gran filósofo y fisiólogo Hans Driesch; el quinto se realizó en Oslo nuevamente precedido por Charles Richet en 1935.

Después de la segunda guerra mundial se fundó en Estados Unidos la “Parapsychology Foundation” que empezó con la organización de diversos congresos en Europa y dentro de la misma unión americana.

La Investigación Universitaria

Hay quienes dicen que la investigación universitaria inicia con el surgimiento del Laboratorio de Parapsicología de la Universidad de Duke, aunque ya había antecedentes por parte de varias universidades.

En 1911, la Universidad de Stanford en California encargó al Dr. John Coover una investigación sobre la telepatía. Coover fue quien empezó a experimentar con cartas para juego que utilizaba para hacer pruebas a sujetos que decían tener habilidades telepáticas. Estos experimentos consistían en que los supuestos dotados tenían que adivinar la carta sin que pudieran verla. Según Coover los resultados obtenidos de las pruebas no resultaban significativas para reconocer la existencia de tal fenómeno.

Entre 1916 y 1917 la Universidad de Harvard encomendó al psicólogo Leonard Troland llevar a cabo experimentos para probar la comunicación telepática, pero en el caso de Troland tampoco se obtuvieron resultados positivos.

Entre 1925 y 1926 la misma institución encargó al Dr. George Hoben Estabrooks volver a experimentar con el fenómeno de la Telepatía, en estas pruebas se contó también con el apoyo del psicólogo William McDougal. Al igual que en experimentos previos se utilizaron cartas de juego para realizar las pruebas, pero a diferencia de los experimentos de Troland se dice que los resultados fueron notablemente favorables esta vez.

En 1927, siendo el profesor McDougal director del Departamento de Psicología de la Universidad de Duke se le presentaron el profesor Joseph Banks Rhine y su esposa Louise, ambos biólogos, pidiendo autorización para desarrollar allí sus investigaciones sobre fenómenos paranormales. Al mismo tiempo, la universidad había dispuesto realizar un estudio sobre el material reunido en sesiones espiritistas, tarea que también le fue confiada a Rhine.

Joseph B. Rhine realizando experimentos con cartas Zener

Alrededor de Rhine se formó un círculo de personas interesadas en sus estudios, destacándose entre ellos Joseph Pratt y Karl Edward Zener, este último fue el creador de las famosas cartas Zener que sustituirían a las cartas de juego para realizar pruebas de aptitudes telepáticas.

Los experimentos realizados por estos investigadores bajo la batuta de Rhine mostraban resultados sorprendentes.

Poco tiempo después de la creación del Laboratorio de Parapsicología de la Universidad de Duke se fundó en 1937 el “Journal of Parapsychology” periódico oficial del laboratorio en donde se publicaban los informes de las investigaciones realizadas por Rhine.

Hoy en día aún causa polémica la realidad de los fenómenos paranormales. Hay científicos que apoyan su existencia, sin embargo, aún hay muchos otros que no reconocen la validez de las pruebas realizadas.

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