Los Mensajes del Cosmos: ¿Contactos Extraterrestres o Grandes Engaños?

 

Desde los primeros registros de la humanidad, la posibilidad de que no estemos solos ha rondado en la mente de filósofos, científicos y soñadores. Pero en tiempos modernos, esta incertidumbre ha tomado una nueva forma, los supuestos contactos extraterrestres en internet. 

 

Algunos afirman haber recibido mensajes de entidades alienígenas, otros aseguran haber sido testigos de comunicaciones intergalácticas transmitidas a través de medios humanos. Sin embargo, la línea entre lo real y la ficción es delgada, y en este abismo han nacido relatos tan fascinantes como polémicos.

Entre los casos más discutidos se encuentran los mensajes del Comando Galáctico Ashtar, las transmisiones de Agencia Cósmica y Swaruu de Erra, y el enigma de los ummitas. A pesar de sus diferencias, todos comparten una estructura similar: una entidad superior se comunica con la humanidad con un mensaje de advertencia, esperanza o revelación. Pero, ¿qué hay de cierto en estas historias? ¿Estamos ante pruebas de contacto genuino o ante un fenómeno sociológico que se reinventa con cada generación?

 

 

El Mensaje Interceptado: El Caso de Ashtar y Vrillon

El 26 de noviembre de 1977, una transmisión televisiva en el Reino Unido fue interrumpida por una voz grave y metálica. La señal de la BBC del Sur fue secuestrada durante seis minutos por una entidad que se identificó como Vrillon, un representante del Comando Galáctico Ashtar. Su mensaje advertía a la humanidad sobre el peligro de sus acciones, instando a la paz y al abandono de las armas nucleares. La emisión, imposible de rastrear, dejó a los espectadores atónitos.

Los expertos en telecomunicaciones nunca encontraron al responsable del evento, y mientras algunos lo calificaron como una broma bien orquestada, otros creyeron que se trataba de una verdadera intervención extraterrestre. Ashtar Sheran, una figura central en la ufología espiritualista, ha sido presentado en múltiples relatos como un ser intergaláctico que protege a la humanidad. Sus mensajes, canalizados por supuestos contactados, han variado a lo largo de los años, pero siempre han mantenido un tono mesiánico.

Aquí compartimos el mensaje emitido por Vrillon, supuesto enviado del Comando Galáctico de Ashtar:

 

 Yo soy Vrillon, del Comando Galáctico. Esta es una transmisión de la Confederación Galáctica de Luz. Nosotros estamos en contacto con ustedes, y a través de este medio, les pedimos que tomen conciencia de la situación de la Tierra. La humanidad se encuentra en un momento crítico. La confusión, la violencia y la codicia están llevando a la humanidad a un destino autodestructivo. Nosotros les pedimos que busquen el entendimiento y la paz, que dejen de lado sus diferencias y trabajen juntos por el bienestar de todos los seres vivos. Su planeta está siendo observado, y queremos que ustedes, seres humanos, sigan un camino de paz. Si se niegan a cambiar, la consecuencia será la destrucción. Nosotros, los del Comando Galáctico, les hablamos con amor y con la esperanza de que el ser humano reconozca su responsabilidad y comience a actuar en armonía con el universo. No teman, somos sus amigos y estamos aquí para ayudarlos. La paz y el amor son la clave de la salvación de su mundo.

 

Aunque el mensaje es muy positivo, la veracidad sobre el hecho de que se trate de un comunicado de origen extraterrestre es bastante polémica.

 

 

 

Swaruu de Erra y la Era Digital de los Contactados

Si en los años 70 las comunicaciones extraterrestres irrumpían en la señal televisiva, en la actualidad encuentran su hogar en las plataformas digitales. Agencia Cósmica, un canal de YouTube dirigido por Gosia Duszak, afirma mantener contacto con seres de las Pléyades denominados Taygetianos, por su procedencia del cúmulo de estrellas Taygeta, en particular se comunica con una entidad llamada Swaruu de Erra. Según su narrativa, estos extraterrestres no solo guían espiritualmente a la humanidad, sino que también ofrecen conocimientos sobre nuestra realidad como una supuesta simulación cósmica.

Los seguidores de este canal ven en Swaruu una fuente de información trascendental, pero los críticos argumentan que sus mensajes son una mezcla de filosofía new age, ciencia ficción y espiritualidad. A diferencia de los antiguos contactados que afirmaban encuentros físicos, los nuevos mensajeros cósmicos han encontrado en el internet una forma de difundir sus ideas sin necesidad de pruebas tangibles. Yo respeto a quienes siguen este tipo de información, pero francamente me parece una vacilada.

 

Los Ummitas: Contacto a Través del Papel y la Web

Uno de los casos más emblemáticos en la historia de la ufología es el de los ummitas. En la década de 1960, se dice que varios investigadores en España y Francia comenzaron a recibir cartas mecanografiadas y llamadas telefónicas de una supuesta civilización extraterrestre proveniente de un planeta llamado Ummo. Estos documentos, escritos con un lenguaje técnico y detallado, explicaban el funcionamiento de su sociedad, sus avances científicos y su interés en la humanidad.

Con el tiempo, el caso de Ummo se convirtió en un fenómeno dentro de los círculos ufológicos, hasta que en los años 90 el aficionado a la psicología y parapsicología José Luis Jordán Peña confesó haber fabricado el caso y las cartas como parte de un experimento sociológico. Sin embargo, en la era digital, el mito ha resurgido con fuerza. En la plataforma X (antes Twitter), varias cuentas que afirman ser ummitas han retomado la narrativa, difundiendo mensajes que siguen la misma línea de las cartas originales.

Hay que destacar que Jordán Peña participaba en programas serios que trataban temas de enigmas y misterio, llegando a colaborar con el respetado psiquiátra Fernando Jiménez del Oso, muy conocido por dirigir programas de misterio, además de publicar varios libros y revistas dedicados a estos temas.
 

 

 

¿Mensajes Auténticos o un Juego de la Mente Humana?

A pesar de las diferencias entre estos casos, todos comparten un patrón: el mensaje de una civilización avanzada que busca guiar a la humanidad, la falta de pruebas verificables y la constante evolución del fenómeno de acuerdo con las tendencias tecnológicas de cada época. Mientras que en los años 60 los mensajes llegaban por carta, en los 70 por señales televisivas, en la actualidad viajan a través de redes sociales y plataformas de video.

Desde un punto de vista psicológico y sociológico, estos relatos pueden interpretarse como una manifestación moderna de las antiguas creencias en ángeles y dioses mensajeros. La necesidad humana de buscar respuestas en fuerzas superiores se ha adaptado a la era de la tecnología, creando figuras como Swaruu o los ummitas en X.

 

 

El Impacto en la Investigación de los UAP (Fenómenos Aéreos No Identificados)

Desde mi muy particular punto de vista, el mayor problema de estos relatos no es su existencia, sino el daño que causan a la investigación seria del fenómeno UAP (Unidentified Aerial Phenomena) antes OVNIs. En los últimos años, gobiernos y organizaciones han comenzado a reconocer la existencia de objetos voladores no identificados con comportamientos que desafían nuestras leyes de la física. Sin embargo, la abundancia de relatos sin fundamento, fraudes y mensajes canalizados han permitido que el escepticismo y el ridículo sigan empañando el estudio de estos casos, al parecer legítimos.

En un momento en el que el Pentágono y la NASA han abierto líneas de investigación sobre los UAP, el peso de estos relatos refuerza la narrativa de que todo el fenómeno es una farsa. Esto aleja la posibilidad de que se realicen estudios más profundos y que se busquen respuestas en los lugares correctos.

Entonces, ¿qué debemos hacer? La respuesta no es rechazar todo relato de contacto, sino abordarlo con escepticismo crítico y exigir pruebas. Separar la especulación de la evidencia es el primer paso para comprender si realmente estamos siendo observados por inteligencias no humanas o si, una vez más, nos encontramos frente a un reflejo de nuestra propia imaginación proyectada hacia las estrellas.

Pero, como siempre digo, la última palabra la tienen ustedes. 

Imagen de encabezado creada con ChatGPT